Madrid y Andalucía, las regiones más castigadas

El impuesto de solidaridad sobre las grandes fortunas pasa de largo en La Rioja, y en otras siete comunidades autónomas, seis de ellas comandadas por el Partido Socialista, y se cebará fundamentalmente con Madrid y Andalucía.
El informe realizado por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) sobre el impuesto de solidaridad sobre las grandes fortunas que estará vigente dos años, detalla que el gravamen es deducible con el Impuesto de Patrimonio, por lo que no tendrá efecto en las regiones con tipos superiores al nuevo tributo. Es decir, -1,7% para fortunas de entre 3 y 5,4 millones; 2,1% entre 5,4 y 10,7 millones y 3,4% a partir de 10,7 millones de euros.
Cumplen con estos requisitos La Rioja, Comunidad Valenciana, Aragón, Castilla-La Mancha, Canarias, Canarias, Castilla y León y Extremadura.
Ahora bien, sí afectará a los contribuyentes de las otras diez comunidades autónomas aunque con diferencias sustanciales en función del tipo que aplica cada una de ellas en el Impuesto de Patrimonio.
Por ejemplo, tanto en Madrid como en Andalucía el impuesto de patrimonio está bonificado en su totalidad por lo que deberán abonar el nuevo gravamen cuando el patrimonio supere los 3,7 millones. Dicho de otra forma, el mínimo a partir del cual se aplicará el impuesto de solidaridad.
La Fundación calcula, también a modo de ejemplo, que un contribuyente con un patrimonio neto, descontada la vivienda habitual, de 4 millones de euros, abonará 5.400 euros en Madrid o Andalucía. Sin embargo, en el resto de regiones quedaría exento.
En el resto de regiones, tendrán que abonarlo los contribuyentes con patrimonios superiores a los 8,6 millones en Galicia, 16,6 en Cataluña, 23,9 en Asturias, 25 millones en Murcia, 26,3 en Cantabria y 209,8 en Baleares.
En las diputaciones forales, los umbrales se sitúan en 13,2 millones en Álava, 13,1 en Guipúzcoa, 10,6 millones en Navarra y 9,6 en Vizcaya.